Retratos de usuarios: Michèle y André, retirados pero muy ocupados

En Babbel estamos lanzando la serie ‘Retratos de usuarios’: una instantánea de sus vidas que narra la razón por la que decidieron aprender un idioma. Si quieres compartir tu historia con nosotros, escríbenos un comentario abajo. Este mes hemos entrevistado a Michèle de Caen en Francia y a André de Québec. Michèle y André no […]
Retratos de usuários

En Babbel estamos lanzando la serie ‘Retratos de usuarios’: una instantánea de sus vidas que narra la razón por la que decidieron aprender un idioma. Si quieres compartir tu historia con nosotros, escríbenos un comentario abajo. Este mes hemos entrevistado a Michèle de Caen en Francia y a André de Québec. Michèle y André no se conocen, pero tienen muchas cosas en común. Los dos tienen 65 años y se retiraron hace muy poco tiempo. Además,  les encanta viajar. Por eso están aprendiendo español con Babbel para poder disfrutar al máximo de sus viajes alrededor del mundo.

“¡Desde que me jubilé no he parado!” dice Michèle, recién jubilada de la región de Caen en Francia. Como tantos retirados, siempre estaba muy ocupada, pero decidió integrar el aprendizaje de idiomas en su apretada agenda. Michèle tiene muchos proyectos. Le apasiona viajar y volvió encantada de su último viaje a Perú, donde descubrió que no se le daba tan mal comunicarse con la gente del lugar: “Empecé de cero con el español y en este viaje me di cuenta de que había realizado grandes progresos después de 5 meses aprendiendo con Babbel”.

Si bien viajar es una de sus pasiones, no es la única. Desde los años setenta, los jubilados no han dejado de conquistar el mundo, siendo el grupo de mayores de 60, los que disfrutan de las mejores y más largas vacaciones.

Recién retirado de las finanzas, encontramos a nuestro elegante jubilado de oro, André, procedente de Québec. También André decidió disfrutar al máximo de su recién estrenado tiempo libre y tomarse un año entero de vacaciones: “Ahora que estoy retirado, paso parte del invierno en Florida y viajo muy a menudo con mi pareja. Es lo que me anima a seguir aprendiendo idiomas. Dominar diferentes idiomas es muy importante para nuestros planes de viajes”.

Michèle conoce también la importancia de los idiomas para viajar.  Siendo una gran apasionada de Latinoamérica, no podía imaginarse llegar a Perú sin conocer, al menos, un poco del idioma: “Es mucho más agradable visitar un país si puedes comunicarte, preguntar por direcciones o interactuar en un nivel básico con los lugareños. Después de aprender 5 meses con Babbel, aunque no podía participar en conversaciones filosóficas, ya era capaz de defenderme bastante bien en el hotel o en la calle. Podía leer las señales, encontrar mi propio camino y comunicarme con la gente del lugar. Definitivamente me ayudó mucho a orientarme en la ciudad y en la comunicación diaria”.

Ya lo sabemos:la edad no es una barrera para aprender idiomas y la jubilación, más que nunca, es el mejor momento para aprender algo nuevo. Además, el 31% de los trabajadores americanos están pensando emprender nuevos retos en la jubilación y, al menos, un 12% de ellos desean tomar parte en actividades educativas.

Para muchos de nosotros, la jubilación es, a menudo, el momento de perseguir nuestros sueños, de hacer todo lo que siempre hemos deseado hacer y hemos debido posponer por falta de tiempo. “Hace años tomé clases de español, lo suficiente para moverme y poder viajar por México y Latinoamérica, pero no lo suficiente para comunicarme de verdad. Siempre tuve en mente retomar la tarea”, explica André.

Como dice el refrán “sabe más el diablo por viejo, que por diablo” y Michèle y André han descubierto, sin duda, el secreto del aprendizaje de idiomas: la perseverancia. Sentada cómodamente en su sofá, Michèle aprende “un poco de español todos los días en su tablet o  en su portátil”. André, por su parte, ha estado aprendiendo “por lo menos 20 minutos al día, 5 días a la semana durante más de un año” y está convencido de que conseguirá su objetivo: “Estoy seguro de que puedes aprender a hablar diferentes idiomas al cabo de unos años”, explica.

Del mismo modo, Michèle tampoco tiene intención de dejarlo por el momento. Ya está pensando en sus próximos viajes: “Quiero ir a España este año y después, a Latinoamérica de nuevo, ¡razón de más para seguir aprendiendo!”.

¡Si como Michèle y André, te gustaría compartir tu historia con nosotros, simplemente deja abajo un comentario!

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